viernes, 30 de junio de 2023

La voz de los pueblos de Castilla y León



Con una nutrida concurrencia, se inaguró en el Centro Salamanca de Buenos Aires - que preside Ruben Gomez - el ciclo institucional dirigido por la Profesora Liliana Montiel, distinguida con la Medalla de la Hispanidad.


Luego de la bienvenida dada por el Vicepresidente Lorenzo Lucas González y 
la responsable del Departamento de Cultura Prof. Graciela Lafrocce, 


pudimos recorrer los bellísimos museos de sitio que presentaron arte, 
objetos de uso cotidiano, telas y muchas otras muestras del acervo castellano y leonés.


Liliana Montiel habló sobre el proyecto, cuyo nombre completo es "Castellanos y Leoneses sueñan... recuerdos, sentimientos de la emigración. La voz de los pueblos de Castilla y León". Tiene que ver con la memoria - afirmó -: "La historia oral es una propuesta que intenta rescatar el patrimonio cultural inmaterial, su historia contada y cantada de boca de los inmigrantes o sus descendientes llegados a la Argentina. Recuperar herencias y recuerdos ligados a la tradición de valles y montañas en las nueve provincias de Castilla y León". 
"Se presenta - afirmó - no como función artística sino como divulgación cultural de nuestras raíces castellanas". Acerca de la organización del material, explicó: "Es un ciclo de cuatro encuentros. En nuestro primer encuentro nos acompañaron las provincias de Burgos, Salamanca y Palencia. Compartimos su gastronomía, museos de sitio, música, trajes tipicos, canciones y bailes tradicionales, los que bailaban y cantaban nuestros padres y abuelos y fueron pasando a nosotros por tradición oral de generacion en generacion. Está convencida de que: "La verdadera tradición no es una reliquia del pasado ido irremisiblemente; es una fuerza viviente que anima e informa el presente".


En primer lugar, relató su historia la burgalesa Angela Lopez Segura, autora de páginas incluidas en el volumen "V Premio Memoria de la emigración castellana y leonesa", que tiene a Juan Andrés Blanco Rodriguez por editor principal. En esas paginas narra una historia estremecedora: la de un padre - el abuelo de Angela - que da por muerto a su hijo, a quien reencuentra tiempo después.  Este hecho tiene que ver con la emigración del hermano que le seguía al mayor, y es éste segundo hijo quien impulsa a los sobrinos a emigrar, tantas eran las maravillas que contaba de la Argentina. Ya aquí, Angela conoce el Centro Burgalés - su "segunda casa" - , aprende a jugar bolos burgaleses, forma una familia. Todo esto relatado por ella con mucha simpatía y un acento muy hermoso.



Iluminada Fernandez Gonzalez, por su parte, nos habló de otro aspecto de la dura vida en España: la de los mineros palentinos. "El carbón era un gran negocio, pero también era un sitio de explotación y muerte", afirmó. Sus abuelos, sus tíos y su padre trabajaban en la mina. Se refirió a esta realidad en un capítulo del libro "La memoria palentina", en el que plantea la dualidad de estos hombres, agobiados por el oficio y alegres en sus canciones y costumbres.   Explica usos de su tierra, como el por qué de la banda dorada que lleva el traje típico palentino. Y agradece: "Gracias, Argentina, por la posibilidad de vivir aquí y ser feliz".


Joaquin Rebollo Pérez también recordó su vida, y lo hizo relacionandola con los sonidos de su tierra salmantina. Con los objetos que iba mostrando, ilustraba la evocación de las horas del día, a las que reconocía al oír los cencerros, las campanas y sus distintas formas de repicar, ya fuera alegre o triste el suceso al que aludían. Narró un recuerdo de su infancia, cuando era Joaquinito, el hijo de Joaquín y nieto de Don Joaquín, un hecho que podía haber sido muy terrible para un niño de corta edad, del que su madre lo salvó llevándolo a casa. Ya adulto, en horas de desazón, siente la mano de su madre, siempre presente en la memoria.

Ballet Luna Morena

Ensamble de Castañuelas

Marita Tuero, Ezequiel Dalairac

Guadalupe Maiorino, Luis Cejas, Ezequiel Dalairac

Montiel destacó la participación de cada una de las personas que aportaron su saber y su tiempo para que esta idea se concretara: "Todo este trabajo se pudo hacer gracias a las autoridades de los centros y sus representantes: Angelita López Segura, de Burgos; Iluminada Fernandez González, de Palencia, y Joaquin Rebollo Pérez, de Salamanca. Y gracias a la colaboración de gente como Graciela Lafrocce, Silvia Yáñez, Evangelina Alen, Lorenzo Lucas González, Ana Pascua, Silvina y Virginia Ortega y el aporte de los artistas - Marita Tuero, Guadalupe Maiorino, Luis Cejas, Las Sultanas, el Ballet Luna Morena, Mabel Almirón, el Ensamble de Castañuelas, el pianista Ezequiel Dalairac - que nos llevaron a Castilla y León con sus magistrales interpretaciones, como una jota burgalesa, una canción palentina o un baile charro".

Prof. Graciela Lafrocce

Para finalizar, la Profesora Graciela Lafrocce se refirió a la tradición gastronómica, convidando un hornazo de Salamanca, "una preparación con una sabrosa masa que encierra dentro un relleno elaborado con varios tipos de carnes de cerdo, frescas y curadas, como filetes de lomo adobado, chorizo y jamón ibérico. Aunque actualmente se puede consumir todo el año, esta es una preparación que es tradicional degustar el Lunes de Aguas" *.

Cerró el encuentro la Prof. Liliana Montiel, con estas palabras: "Gracias, gracias a todos por este sueño de viajar en el recuerdo a Castilla y León, muy especialmente a la Federación de Sociedades Castellanas y Leonesas, al Centro Salamanca de Buenos Aires, a Julia Hernando, Presidente del Centro Burgales, a Alfredo Miranda, Presidente del Centro Zamorano y a la Vicepresidente y la Secretaria de la Casa de Palencia, Silvina Morate y María Perez Hernando, que nos han acompañado, y a Melisa Barrionuevo, quien por medio del zoom hizo posible que se transmitiera a la tierra de origen y a las provincias argentinas".


Luego de haber disfrutado de este primer encuentro - disponible en video -, quedamos a la espera del segundo, que tendrá lugar el 25 de agosto. En la segunda parte, podremos conocer más aún otras tres provincias y su legado a la nación que recibió a sus emigrantes.


* https://www.cafenovelty.com/2022/04/12/comida-tipica-de-salamanca/

domingo, 25 de junio de 2023

Día de La Rioja y San Bernabe 2023



El Centro Riojano Español de Buenos Aires se vistió de gala para otra de sus magníficas fiestas. Luego de la bienvenida brindada por el presidente, Dr. Pedro Luis Valenciaga Moreno, comenzó el festejo, con la locución del Vicepresidente Dr. Enrique Mora Llaría.


Hermoso el coro que dirige Laura Rivadeneira, con integrantes tan entusiastas
y el teclado a cargo de Lilian Blanco.


Siempre deslumbrante, el conjunto de danzas, que tiene como profesora a
Mariana Fernández, una bailarina reconocida en la colectividad, 
experta en danzas de varias regiones.


Emotivo fue el momento en el que la Dra. Alejandra Riera, 
Presidente de la Casa Balear de Buenos Aires, 


hizo entrega al Dr. Valenciaga de la placa 
conmemorando el centenario del centro riojano.


La presencia de tantas autoridades de distintas autonomías destacan el cariño que se tiene por esta institución. Fue una gran alegría ver entre los dirigentes a Don Pedro Bello Díaz, ex presidente de la Federacion Castellana y Leonesa de la Argentina y de la Federacion de Sociedades Españolas de la Argentina, entre otros relevantes cargos.


Exquisita la paella preparada por Pedro Crespo, 
con bandera y el nombre de La Rioja.


Muchos y muy importantes premios fueron rifados a lo lalrgo de la tarde.


Pudimos disfrutar de la maravillosa voz de Claudio Villafañe, 
quien interpretó temas románticos de ayer y de siempre


y del talento y la simpatía de Rocío del Cielo
(luciendo el sombrero de Pedrito Rico) 
y Las Sultanas

Con ellos, el baile no tenía fin... 
Miren a los socios bailando en el escenario con los artistas!
Esa es la actitud!


Y como siempre, el Ingeniero José Calvo, Secretario del Centro Riojano Español,
en la cabina, asegurando la diversion para todos con su impecable trabajo.

Felicitaciones, riojanos! Y Gracias! Nos vemos en julio!

viernes, 16 de junio de 2023

Charla de María Teresa Armas en el Centro Riojano Español de Buenos Aires



Continuando con su prestigioso ciclo de conferencias, llevado a cabo con el apoyo del Gobierno de La Rioja, el Centro Riojano Español de Buenos Aires nos brindó la oportunidad de escuchar a la Dra. María Teresa Armas, quien compartió su "Testimonio y vivencias de una estancia en España", el relato sobre la experiencia vivida durante una estancia de Doctorado realizada en la Universidad de Zaragoza.


La presentó el Doctor Pedro Luis Valenciaga Moreno, Presidente de la institución, y la asistencia técnica estuvo a cargo del Secretario General, Ing. Jose Calvo.


La conferencista es Doctora en Ciencia de la Educación, Licenciada en Gestión Educativa y Profesora de Filosofia y Pedagogia. A lo largo de su vasta trayectoria, se ha desempeñado como Profesora con desempeño en los niveles universitario, terciario y medio, Directora de Nivel Terciario (Provincia de Buenos Aires y Ciudad Autónoma de Buenos Aires); ha publicado en revistas de la especialidad y se presentó en congresos y jornadas nacionales e internacionales.
María Teresa Armas es hija de Santos Armas Barrón, emigrante riojano nacido en Nieva de Cameros, Logroño, en 1906. Acerca de la fecha de su emigración, ella tiene conocimiento de que en 1920, el alcalde le extiende un certificado de buena conducta. La participación del riojano en la colectividad siempre estuvo asociada al Centro Riojano Español de Buenos Aires - nos dice -. Su padre participaba de todas las celebraciones en la sede de la calle Independencia, concurría asimismo a jugar a las cartas los días sábados y también alguna noche durante la semana.
La tierra de origen siempre estuvo presente en su vida y en la de la familia que formó: "Conservó sus amigos del pueblo; con dos de ellos vino en el mismo barco y todas sus amistades eran españolas. En casa, la tradición era la comida española e incluso mi hermana y yo estudiamos danzas españolas y bailamos en recitales en el teatro Avenida. Yo en algunas oportunidades bailé en el Centro Riojano Y aún más, mis padres se conocieron en un baile en el Centro Riojano, en la época del 1938 o 1939.
También emigró su tío, Gabino Armas Barrón, nacido en 1891. No tiene datos de la fecha exacta en que emigró. "Recuerdo vagamente que decían que el vino a los diecisiete años".
Le pido a la Doctora que comparta algun recuerdo de su infancia relacionado con la colectividad:
"Hay uno que me viene a la memoria, cuando íbamos con mis padres el 6 de enero al Centro Riojano el Día de Reyes, para recibir los tradicionales regalos. En casa, siempre se habló de España y más precisamente de La Rioja. Pero aún no sé por qué, si bien yo tenía dos hermanos menores, la más apegada a las tradiciones españolas fui yo.
En la celebración del 31 de diciembre, en casa justamente de mi tío, el único que tenía en Argentina por línea paterna, nunca faltaban el turrón español, las confituras y los pasodobles".
Años después, ella pudo conocer el pueblo del que tanto le habían hablado: "Concreté mi primer viaje ya grande, en 1995. Decidimos viajar con mi esposo y nuestros dos hijos varones. En realidad, el itinerario comenzaba en Roma. El vuelo era Buenos Aires-Roma con cambio de avión en Madrid. Eran épocas de vuelos con escalas… El avión hizo escala no recuerdo si en San Pablo o Río de Janeiro y fue chocado por un carrito de esos que transportan los equipajes. Se complicaron los horarios y pérdimos el vuelo de conexión por lo tanto, fuimos alojados en el aeropuerto de Barajas, para partir para Roma al día siguiente. Cenamos en el hotel y se nos ocurrió pedir un taxi e ir a recibir el nuevo año a la Puerta del Sol y comer las uvas".
Acerca de su llegada a La Rioja, comenta:
"El viaje en total tuvo una extensión de cuarenta y cinco días, muy largo por cierto. El último punto del itinerario era España. Llegamos de Londres en avión a Bilbao. Tomamos el auto que teníamos reservado y emprendimos el viaje a Logroño. Llegamos avanzada la tarde y nos comunicamos telefónicamente con mi prima, la hija de la única hermana mujer de mi papá. A esa tía, Tomasa, yo la conocía porque unos años antes había venido a Argentina a pasar una temporada.
Nosotros pensábamos encontrarnos al día siguiente, pero no hubo forma de convencerlos. Tuvimos que ir esa misma noche. Imposible olvidar esa comida. Hacía mucho frío, enero… nos sirvieron una sopa bien caliente, revuelto de setas, cerdo al horno, postre y confituras propias de las fiestas que habían sido festejadas al comenzar el año.

Al día siguiente, el viaje a Nieva de Cameros. Manejaba mi esposo, y mi tía iba de copiloto indicándole cada curva, diciéndole "pita, pita". No tenemos que olvidar que es camino de montaña. Llegamos a la casa donde nació mi papá y, por supuesto, mi tío y algunos primos. La casa por fuera estaba igual; por dentro totalmente remodelada. Entré con mi tía y me llevó a la parte de abajo, creo que era el corral y me dijo: “Ahí nació tu padre”. Yo no pude contener la emoción y me largué a llorar y ella desconcertada les dijo a mis hijos: “¿qué le pasa a tu madre?.
Recorrimos Nieva, pero no pudimos entrar a la iglesia porque estaba cerrada y fue imposible conseguir que la abrieran. Volvimos a Logroño para almorzar en casa de un primo Gabino Armas que vivió un tiempo en Argentina y también fue socio del Centro Riojano. Ahí almorzamos patatas a la riojana - yo las comía siempre en mi casa, pero tenían un sabor diferente - con vino de La Rioja. También conocimos el paseo de Portales y la Iglesia de Santa María de la Redonda".
En 2016, comenzó en la Argentina sus estudios de Doctorado:
"De mi doctorado, todo lo que puedo contar es altamente positivo. Formamos un grupo de veinte docentes, de diferentes edades; yo, la más grande, aunque había otra profesora casi de mi edad. Éramos la primera cohorte de doctorado en Ciencias de la Educación de la Universidad del Salvador. Cursábamos los viernes en el turno vespertino y los sábados durante todo el día. La asistencia con este formato era cada quince o veintiun días según la asignatura. Los sábados íbamos a almorzar con el profesor de ese momento. Nos hicimos muy amigos y nos seguimos viendo con frecuencia. La cursada comenzó en marzo 2016 y finalizó en diciembre 2017. En mi caso, finalicé con la cursada y aprobación de todas las asignaturas. Faltaba lo peor: la tesis".
Surgió entonces, la posibilidad de estudiar en España: "En los últimos meses del 2017, en la Universidad nos habían informado sobre la posibilidad de realizar una estancia en alguna universidad extranjera. No era beca. Ellos nos avalaban el viaje de estudios y la Universidad que nos recibía tenía que aceptarnos. Yo había elegido como tema "El rol del maestro coformador en las escuelas primarias de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, su función en la articulación con el trayecto de las prácticas de los institutos de formación docente" y bueno, comencé a averiguar. Primero pensé en Chile, Uruguay, Ecuador, porque lógicamente quería universidades de habla hispana, pero después cambié de idea y me decidí por España. No fue fácil conseguir el lugar, lo que más me resultó en ese momento, fue Zaragoza".
Emprende el viaje, con el objetivo de estudiar la formación docente en España, las similitudes y diferencias con la formación docente en la Argentina, analizar las comparaciones posibles y plantear nuevas perspectivas. La conferencista evoca esos días: 
"Un avión de Iberia me llevó a Madrid. Me preocupaba el traslado de Madrid a Zaragoza. Me aconsejaban el tren que es rápido y en un poco más de una hora me llevaba a destino. Pero tenía que salir de Barajas e ir a Atocha. Averigüé y me informaron que había un bus que salía de la T4 que en cuatro horas me llevaba al lugar. Alrededor de las 15, ya estaba en el hotel, un hotel pequeño en el que me sentí como en mi propia casa. Previamente me había asesorado para que estuviera ubicado cerca de la Universidad. Pues, llegué, saqué mi equipaje y decidí emprender el camino al centro, previo preguntarle a las recepcionistas dónde quedaba. Mi idea en realidad, era ir al Pilar. Yo ya había conocido el santuario en mi primer viaje a España; íbamos de Logroño a Barcelona y pasamos para entrar en él. Pero ahora era distinto: estaba en Zaragoza para recabar datos para mi tesis de Doctorado. Llegué y le pedí ayuda a la Virgen, porque yo era grande, estaba sola y ante lo desconocido".

Facultad de Educación, Universidad de Zaragoza

Su actividad en la institución fue muy completa y variada: "El día lunes me dirigí a la Universidad. También pregunté si estaba cerca del hotel y me sugirieron tomar un bus que pasaba a media cuadra. No quise y marché caminando. Caminé y al cabo de aproximadamente diez cuadras me enfrenté con el campus. Entré y empecé a buscar mi destino: la facultad de Educación era la última, estaba donde terminaba ese campus. En esa facultad transcurrieron mis días. Iba a las nueve de la mañana y me retiraba a las diecisiete o dieciocho. Permanecí muchas horas en la biblioteca, presencié clases, exámenes; presencié diversas muestras en el anfiteatro y también volví algunas noches para participar de algunas actividades extracurriculares porque me interesaba el contacto con los estudiantes. Dentro de la pasantía estaba contemplada la visita a centros de educación elemental y también lo concreté. Participé de clases y me contacté con las tutoras, logrando un intercambio muy fructífero para el tema de mi tesis. Esta pasantía o estancia de Doctorado se plasmó en el segundo capítulo de mi tesis que se titula: “Pasantía realizada en la Facultad de Educación de la Universidad de Zaragoza. Comparaciones posibles”, incluida en el repositorio de la Universidad del Salvador.


Finalizada la charla, fue invitada por los anfitriones a la cena con amigos - a la que también asistimos socios y periodistas -, durante la cual se pudo seguir conversando sobre un tema tan interesante.

Quienes escucharmos a la Doctora María T. Armas, no sólo recibimos información profesional, a través de su exposición clara y amena y el recurso audiovisual que ilustró su charla. Nos transmitió ademas, su historia de estudio y trabajo y su respeto por la tradición heredada, que la ha marcado con la impronta de los valores españoles.

jueves, 8 de junio de 2023

Premio Nacional de Danza María Ruanova 2023 para Luisa Pericet


El Consejo Argentino de la Danza (C.A.D.), creado el 2 de septiembre de 1978, es una asociación civil sin fines de lucro, reconocida por Resolución Ministerial Nº 1262/90 como Organismo Consultor Ad-Honorem del Ministerio de Educación y Cultura. Es Miembro del Instituto Internacional del Teatro (ITI) ONG con relaciones formales de asociación con la UNESCO, Miembro del Comité Internacional de la Danza (ITI), y se encuentra inscripto en el Registro Nacional Obligatorio de Organizaciones No Gubernamentales (CENOC.)
Fundado por la bailarina y coreógrafa Arlet Bon, la concertista de piano Susana Frugone de Basualdo y la Funcionaria de la Comisión de Cooperación Internacional UNESCO Esther Capdevielle, obtuvo en 2010 el premio “Elena Aleksandrovna Smirnova” 2009, galardón concedido a los involucrados en el mundo de la danza más destacados, y recibió en 2019 una distinción honorífica otorgada por Danzar por la Paz (Fundador y Director: Leonardo Reale) por su incansable labor por el desarrollo de la danza en la Argentina.


En una comunicación del Senado de la Nación, se informa que "El Premio María Ruanova que otorga el Consejo Argentino de la Danza (CAD) es el premio más importante que otorga esta institución y lleva este nombre en honor a la talentosa bailarina sanjuanina María Ruanova quien fue una figura nacional e internacional. Dicho premio fue declarado de Interés Cultural por la Secretaría de Cultura de la Presidencia de la Nación. Con este Premio, que se viene entregando en forma ininterrumpida desde 1986, el CAD conmemora y evoca a aquella gran bailarina (María Ruanova) y reconoce la trayectoria de destacadas figuras de la Danza".
Aunque muchos suponen que Ruanova es un apellido ruso, la verdad es que ella desciende de betanceiros. En "Sendero de mujeres pioneras" se la recuerda como la 
"Primera bailarina formada íntegramente en el Teatro Colón. María Ruanova nació en San Juan, el 3 de julio 1912 y falleció en Buenos Aires, el 5 de junio de 1976. Fue una bailarina, coreógrafa, docente y maestra de ballet de notable actuación Nacional e internacionalmente.
María se formó en la Escuela de Danzas del Teatro Colón, En 1931, por concurso, María ascendió a solista y en 1932 a primera bailarina, año en que bailó "Giselle". En 1934, llegado a Buenos Aires el primer bailarín de la Opera de París, Serge Lifar, la eligió como su "partenaire", luciéndose en "El espectro de la rosa", "El pájaro azul", "Sílfides" y "Prometeo". Por sus excelentes cualidades como bailarina, realizó una gira por Europa donde fue aclamada por el público en las principales ciudades.
María Ruanova ha sido la primera bailarina argentina de rango internacional formada en la Escuela de Danza del Conservatorio Nacional y de la Escuela del Colón, e íntimamente relacionada con el arte hasta 1976, año de su muerte. Pilar de la danza clásica en nacional, es hoy reconocida mundialmente a través de los bailarines que el país dio siguiendo sus pasos.
La "Escuela Nacional de Danzas de Argentina" y el "Instituto Nacional Superior del Profesorado" llevan su nombre en homenaje, por resolución del Ministerio de Educación actualmente el instituto de formación superior y docente es parte de la Universidad Nacional de las Artes (UNA) por Ley Nacional 24.521, Artículo 27, decreto del Poder Ejecutivo de la Nación Argentina.
En su nombre se estableció el Premio María Ruanova, el máximo galardón de la danza argentina".

placa colocada por el CAD en el edificio en el que vivió Ruanova

El jueves 8 de junio, en el Salón Dorado de la Casa de la Cultura de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, se hizo entrega de las distinciones 2023.
El acto se inició con las Palabras de apertura a cargo de la Presidente de la Institución, Natalia Alvarez. Seguidamente, se realizó la Designación de Miembro Honorario del C.A.D., la cual recayó en Beatriz Durante, descendiente de gallegos por la rama materna; la entrega del Diploma de Honor a la Trayectoria a Hugo Jiménez, y los Diplomas de Honor a los Maestros: Teresa Duggan, Susana González, Carina Nimitán, Natacha Poberaj, Koki y Pajarín Saavedra y Sabrina Streiff. La presentación estuvo a cargo de Rolando Alvar.


Finalmente, se entregó el Premio Nacional de Danza María Ruanova 2023 a la Maestra Luisa Pericet Blanco.



Ha recibido numerosos premios a lo largo de su vasta trayectoria; entre ellos, la distinción de Personalidad Destacada de la Cultura "por su trayectoria profesional y aportación a la difusión de la cultura en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires", otorgada en 2016 por la Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires.

Y, en 2019, el homenaje de sus alumnos del Centro Galicia de Buenos Aires, de cuyo Grupo de Danza es Directora General desde hace décadas.


En esta oportunidad, son sus colegas quienes la homenajean. Como Luisa Pericet Blanco no pudo asistir por problemas de salud, recibió el premio su hermana Carmelita, de manos de la Presidente del CAD, Natalia Alvarez, acompañada por la Miembro Honorario Beatriz Durante.


Un texto escrito por Luisa en 2009 fue leido por Rolando Alvar. En él, manifestaba la sevillana: 
"Soy Luisa Pericet Blanco. Nací en Sevilla, en la Plaza Zurbarán nº 3, en una casa maravillosa de patios y escaleras de marmol. Recuerdo mi niñez muy feliz, disfrutando de todos los paseos en coche de caballo por la Plaza España, luciendo nuestras pamelas con mi hermana Conchita. También recuerdo la academia de mi padre, en esa casa con los balcones abiertos, y la alegría que se respiraba los días de repaso. Siempre me emociono hasta las lágrimas cuando veo la Giralda y camino por mi tierra. Cuando nos mudamos a Madrid, y mi hermano Angel se dedicó a bailar profesionalmente, empecé a ayudar a mi padre con las clases cuando volvia del colegio, donde también montaba las coreografías para los festejos. A partir de ahí, me dedique de lleno a la enseñanza. (...) 
Con dieciocho años viajé a la Argentina, donde estaba mis hermanos Angel y Conchita, bailando en el Teatro Avenida de Buenos Aires. Pusimos mi hermana y yo una gran academia, y Angel siguió su carrera por todo el mundo. He tenido la suerte de ser elogiada, mimada y reconocida como maestra y coreógrafa. Monté muchos espectáculos, entre ellos, uno para Norma Aleandro y José María Vilches, para Sara Montiel, Miguel de Molina, la Botica del Angel de Bergara Leumann y Romería. Cuando mi hermano formó su compañía, me pidió que me hiciera cargo de la iluminacion y dirección de escena, cosa que he seguido haciendo hasta hoy. Actualmente, y desde hace treinta años, estoy dando clases y ejerciendo la dirección de las escuelas del Centro Galicia de Buenos Aires. 
Quiero terminar esta semblanza agradeciendo a la Argentina los premios y el cariño que me ha otorgado. También a mi familia, lo que nos legaron. Y si tuviera que pedir un deseo, sería que España no permita que se pierda el patrimonio de todas nuestras danzas regionales y de escuela"


A continuación, se formó la mesa redonda para dialogar con la premiada; en su ausencia la integraron Carmelita Pericet Blanco, su sobrina Concepción Cuervo Pericet, José Zartmann y el Dr. Fernando López Pereira, con la coordinación de Laura Falcoff.
Habló en primer lugar Carmelita, quien expresó: "Los maestros se nutren de los exitos de sus alumnos, porque a los que bailamos nos aplauden y tenemos nuestro orgullo satisfecho, pero el maestro está para ser maestro, y mi hermana solo quiso ser maestra. Ella podía haber sido bailarina como todos nosotros, tenía capacidad. Bueno, ella tiene capacidad para todo, pero  no queria salir al escenario, queria hacer gente que saliera al escenario y eso es lo mejor que le puede pasar en la vida: figurarse que uno puede hacer que la gente se siente a mirar que el cuerpo de un ser le da forma a una musica, es maravilloso".
Concepción Cuervo Pericet, curadora de la muestra que se expone en prestigiosos espacios de Buenos Aires, afirmó acerca de su tía: "Fue pionera, pionera en un mundo de hombres, de dirección artística y de luces, o sea ella era la unica mujer en una cabina de luces y en una dirección entre cajas y entre hombres".
El Dr. Fernando Lopez Pereira, Vicepresidente Primero del Centro Galicia de Buenos Aires, agradeció al CAD el recordar a estas figuras, el homenajearlas en vida y señaló que "ser maestro de danza es mucho mas que enseñar una tecnica, enseñar alguna coreografia, intentar que alguien recuerde como son los pasos o que por lo menos, trate de hacerlos en un tiempo o en el otro, es mucho más que eso. es definir a la persona misma muchas veces en edades muy tempranas, es darle alegría a la gente, pero por sobretodo, es formarla. Y Luisa no solamente ha sido maestra de maestros, sino que es una formadora de personas, y es una alegría para mi, para el Centro Galicia de Buenos Aires, para todos los que conformamos esa gran familia española en la Argentina, realmente homenajear hoy a Luisa Pericet Blanco".
José Zartmann, bailarín y coreógrafo del Teatro Colón de Buenos Aires, se refirió a los hermanos Pericet: "La estrella es Luisa, pero está toda esa familia de la que hemos aprendido y quiero yo, particularmente - permitanme que sea en nombre de todos los bailarines argentinos que han querido hacer  la danza española -, decirle nada mas que algo muy sencillo  a Luisa, a Angel,  Eloy, Conchita, María del Amparo, con quien he bailado tanto en los espectáculos, - bueno, ellos estan aquí, los que se fueron, pero siguen estando con nosotros en nuestros recuerdos y toda esta enseñanza - así que en nombre de todos los bailarines argentinos que hemos querido hacer la danza española y hemos caido gracias a Dios en manos de Luisa y de sus hermanos, simplemente Gracias, con mi alma de rodillas, Gracias!".

autoridades y alumnos del Centro Galicia